martes, 25 de enero de 2011

toylets


Los chicos de Sega están probando un nuevo género de juegos en los lavabos de algunos bares de la ciudad de Tokio: se trata de los Toylets (de toy, juguete, y toilette).
Uno de los juegos juzga la precisión del jugador y consiste en borrar con la orina los dibujos diseñados sobre una representación virtual del urinario que aparece en el visor del usuario. Otro de los juegos, bautizado como “Manneken Pis” en honor a la célebre estatua belga de un niño orinando, mide la potencia del chorro mediante el volumen de líquido vertido.
Por otra parte, una versión “dual” permite al cliente comparar la potencia de su chorro con la de la persona que le ha precedido en el urinario.
Miren que no soy partidaria de la discriminación positiva, pero en este caso creo que está más que justificada la necesidad de que saquen una versión para mujeres ya pispo. Es que con esta, no sé, lo veo un poco difícil.
Por cierto, ¿conocen las esculturas de David Cerny que hay en Praga?

4 comentarios:

Alberich dijo...

Su entrada me recuerda que en ciertos urinarios europeos (si mal no recuerdo uno de ellos en el aeropuerto de Armsterdam) hay una mosca estampada al fondo, que a su vez hace las veces de punto de mira para afinar la puntería.
Les esculturas de Praga son de un escatológico espectacular de gran eficacia de cara al turismo...

Helter dijo...

Además estas esculturas escriben al azar citas de escritores famosos. Incluso hay un teléfono al que se pueden enviar un SMS y estos señores escriben con su chorrito lo que uno haya puesto. ¿Se imagina? "Te quiero, caramelito". No es lo mismo que escribirlo con el escape de un avión en el cielo, pero lo que cuenta es la intención, dicen.

Ay, creo que me está dando un ataque de envidia de pene.

Harry Sonfór dijo...

Pues es una idea estupenda, oiga. ¿Para cuándo en España? ahora, con la ley antitabaco, en los urinarios públicos ya no se puede disfrutar de eso tan bonito de hacer bailar con el chorro de orín una colilla del cigarrillo que había tirado el anterior (y guarro) usuario del mingitorio.

Helter dijo...

Hombre, siempre puede llevarse una colilla de casa. Más difícil lo tenemos las señoras y no nos quejamos. Vale, un poco sí.