lunes, 4 de enero de 2010

números


7:84 Esta fue la ofrenda que los príncipes de Israel ofrecieron para la dedicación del altar, el día en que fue 1gido: 12 platos de plata, 12 jarros de plata, 12 cucharas de oro.
7:85 Cada plato de 130 siclos, y cada jarro de 70; toda la plata de la vajilla, 2400 siclos, al siclo del santuario.
7:86 Las 12 cucharas de oro llenas de incienso, de 10 siclos cada cuchara, al siclo del santuario; todo el oro de las cucharas, 120 siclos.
7:87 Todos los bueyes para holocausto, 12 becerros; 12 los carneros, 12 los corderos de 1 año, con su ofrenda, y 12 los machos cabríos para expiación.
7:88 Y todos los bueyes de la ofrenda de paz, 24 novillos, 60 los carneros, 60 los machos cabríos, y 60 los corderos de 1 año. Esta fue la ofrenda para la dedicación del altar, después que fue 1gido.
7:89 Y cuando entraba Moisés en el tabernáculo de re1ión, para hablar con Dios, oía la voz que le hablaba de encima del propiciatorio que estaba sobre el arca del testimonio, de entre los 2 querubines, y hablaba con él.

6 comentarios:

Badil dijo...

Barato les salió.
En la siguiente guerra que les ayudó a ganar les cobró 7.500 ovejas, 790 bueyes, 670 burros y 350 mujeres solteras ( del enemigo) y 120 kilos de objetos de oro.
¿De dónde sacaban las cabras para el sacrificio si no consta que a los vencidos les confiscaran cabra alguna?. Pues igual las sustituyeron con las mujeres solteras.
Con este trajín de ganao, es normal que Dios les llevara las cuentas

Harry Sonfór dijo...

Me parece super amazing pero en bad. Que no veo yo lo de preparar la mesa del sacrificio con platos y jarros de plata y luego las cucharas de oro. Que no queda bien. Eso la Lomana lo sabe, que no queda bien mezclar metales en la mesa. Si vamos a oro, vamos a oro; y si vamos a plata, vamos a plata. Que se pone una jarrita de plata con el asa dorada, pues aún va que te va, que puede quedar como un detalle fino, pero eso de mezclar cuberterías, si no se hace con mucho tino, suele quedar mal.

Anónimo dijo...

Por favor dejen de acosarme. Les pido que terminen de agobiarme. No cumplo para nada los requisitos que ustedes buscan. Me quedo en mi país. Hago unos petes deliciosos.
¿Algo más quieren saber?

Badil dijo...

si, anonimo. ¿Es usted dios?
N0s prepare unos desos. Porfa.

Anónimo dijo...

No soy Dios, me sentía con una misión y es imposible. Lo lamento. ¿Pueden dejarme en paz?

Helter dijo...

Apreciado Sr. Anónimo:
Dice usted que le acosan. ¿A quién se refiere? Porque yo soy sólo una. Y además no sé cómo voy a acosarle si no sé quién es usted.
Y por último, pero no por ello menos importante, ¿sabe usted exactamente qué es un pete?