jueves, 24 de abril de 2008

págame lo que me debes, Pepe


Por la noche tenía los pies destrozados.

En una paradita de Dianética, una mujer blanca recibía un masaje en la espalda de un hombre negro. Me pareció una imagen preciosa, pero antes de plasmarla les pedí permiso. Mal hecho. Insistieron en venderme un libro, y después de negarme posaron para mí pero con cara de foto. Me pregunto en qué tarjeta deben almacenarse las fotografías que no se han podido hacer.

En el palacio de la Virreina había un montaje de pizarras para que la gente escribiera lo que quisiera. Al pasar por delante, oí cómo un argentino le decía a los que iban con él: “la mujer española, cuando se casa ya no tiene más amigos”. De repente se para al ver que una chica acababa de borrar una pizarra. Hecho una furia fue hacia ella. “¿Por qué la borras? ¡Si es para vosotras!”. La pizarra decía “Hoy una rosa, mañana dos puñaladas”. Él volvió a escribirla con tanta rabia que las letras le quedaron desdibujadas.

Junto a las pizarras estaba el escenario de Com.Ràdio y los papeles para firmar por la calle del Capitán Trueno. Firmé. Albert Espinosa firmaba libros con cara de niño feliz.

Pepe Rubianes ha anunciado que tiene cáncer de pulmón y está en boca de todos. Lo siento por él, pero no lo siento más de lo que lo sentiría por un vecino, por un amigo o por un familiar. Ha hecho lo que ha querido, ha dicho lo que le ha dado la gana, ha conseguido vivir haciendo lo que le gusta. He leído frases dedicadas a él por esas criaturitas mediáticas que se dicen amigas suyas, todas ridículas excepto una, la que le dedicó (monsenyor) Carles Flavià. “Págame lo que me debes, Pepe”. Con dos cojones. Si Pepe sabe lo que le conviene, mantendrá a su lado a Carles en todo momento. No está al alcance de cualquiera recibir la bendición de un cura arrepentido que fue manager de la Orquestra Plateria y del Gato Pérez, que empezó oficiando bautizos y entierros para acabar colgando los hábitos, que se casó con la exmujer de Pepe, Lucy, que criticaba a Pepe porque “eso que tú haces lo puedo hacer hasta yo” y lo ha demostrado en el escenario.

Me habría gustado escribir esto ayer, seguro que he olvidado cosas dignas de ser escritas, pero me quedé dormida delante del ordenador. Tengo los pies destrozados, pero ha valido la pena. Tengo todo un año por delante para recuperarme.

4 comentarios:

Trikki dijo...

Menudo susto me habías dao, creí que te debía argo.

Helter dijo...

Y me lo debes. ¿Ya no te acuerdas? Bendita memoria selectiva.

Harry Sonfór dijo...

¡Qué grande es la Helter cronista!

Trikki dijo...

Oiga, si es grande si, y una receta casera para lo de los pies es meterlos en vinagre. Ya, sé que da agco, pero funciona.