Whodunit procede del inglés Who done it? (“quién lo hizo”, aunque yo lo traduciría por “alguien ha matado a alguien” como homenaje a este señor). Es el nombre que le dan los ingleses a un subgénero de historias de detectives en el que el lector o espectador, a partir de las pistas que se le dan, puede jugar a deducir quién es el asesino. La típica historia tipo Diez negritos de Agatha Christie.
Pero cuando la gente se cansó un poco de este esquema, apareció el howcatchem o howdunnit (cómo pillarle o cómo lo hizo), en el que desde el principio de la historia se sabe quién es el asesino y cómo lo ha hecho, y el suspense está en cómo le pillan al final. Colombo y su gabardina mugrienta, para entendernos.
Dicen que el primer whodunit del que se tiene constancia es el cuento de Las mil y una noches llamado Las tres manzanas. Pero el más divertido es, sin duda, la película Un cadáver a los postres (Murder by Death), con un reparto casi imposible y un guión desternillante. La venganza definitiva para tantos lectores burlados.
7 comentarios:
Gracias por haberme recordado esa peli, si, es muy divertida y se me había ido completamente de la cabeza.
Bye bye
Es muy grande.
También mola esa que hay un cadaver que me parece que no ha matao nadie, pero que todos esconden porque se creen culpables.
Un placer, Spanique. Es de esas pelis que, por veces que haya visto, si la pillo por la tele no puedo evitar volver a verla hasta el final. Como Arsénico por compasión, vaya otra, aunque con el paso del tiempo veo pelín sobreactuado y payasete a Cary Grant. Peter Lorre estaba en su línea, inmenso.
La que dice usted, Badil, podría ser Arsénico... o también Pero, ¿quién mató a Harry? de Hitchcock. Ojo, a otro Harry, no a nuestro griposo colega. A nuestro Harry no hay quien lo tumbe gracias a su (mala) salud de hierro.
Eso mismo dice mi señora, que tengo una mala salud de hierro, como las abuelitas con perras para heredar (pero sin nada que heredar, ahí está el problema). Está muy guapa la Badil toda enchilada. Que si le gustan los chiles, Badil, tengo unos en casa, de esos que se usan cortados en tiras finas para las angulas, que son un primor, que si le llevo.
Después del ataque de la gamba furibunda me he pasao al verde, si; entre yo y lo amarillo, pasillo. Pero he empezao con las borrajas que son mucho mejores personas, Harry.
Que estoy por grabarme el sonido de las tripas y venderlo como banda sonora para pelis de monstruos de pantanos que borbotean.
Pues si es que no hay gamba buena. Llevan ahí genéticamente el odio al ser humano por la cantidad de miembros que pierden de su especie en los cócteles humanos y luego van y se vengan. Pues si es que tienen razón.
Bueno, me han dejao en bandeja el chiste ese de dos gambas que se encuentran por la calle y una le dice a la otra: Oyes, hace tiempo que no veo a Pepe, ¿qué sabes de él?
Y contesta la otra: Hija, no sé, hace una semana que me dijo que iba a un cóctel y todavía no ha vuelto.
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